Angustia y Obsesión.
Hay un tipo de pensamiento obsesivo que se centra y reitera alrededor de dudas sobre si uno se habrá comportado bien, o si habrá dicho algo adecuado o no, o si quizás ha dejado de hacer algo que le correspondía o que se esperaba de él/ella.
El pensamiento como tortura
Ese pensamiento es una especie de carcoma que mantiene a algunas personas completamente atrapadas en él todo el día, todos los días.
Y ¿por qué se produce?
Expliquemos en primer lugar un concepto, el de software. ¿Qué es el software de un ordenador? Voy a copiar literalmente la definición de Wikipedia: “Se conoce como software al equipamiento lógico o soporte lógico de una computadora digital; comprende el conjunto de los componentes lógicos necesarios que hacen posible la realización de tareas específicas, en contraposición a los componentes físicos, que son llamados hardware (o lo que sería el cuerpo físico derivado del genoma, esto es una analogía propia).
Los componentes lógicos incluyen, entre muchos otros, las aplicaciones informáticas; tales como el procesador de texto, que permite al usuario realizar todas las tareas concernientes a la edición de textos; el software de sistema, tal como el sistema operativo, que, básicamente, permite al resto de los programas funcionar adecuadamente, facilitando también la interacción entre los componentes físicos y el resto de las aplicaciones, y proporcionando una interfaz para el usuario”.
Imaginemos que el software de un individuo viene marcado por todas las experiencias y aprendizajes que vivió desde que era un embrión en el vientre de su madre hasta que se hizo adulto.
Imaginemos, de nuevo, que las experiencias acumuladas han generado unos componentes lógicos excesivamente rígidos y limitados, donde, por ejemplo, el placer o las experiencias de placer a cualquier nivel, son vividas con gran culpabilidad, igual que todo aquello que no se ajusta a un rigor en el comportamiento que se base en estar siempre “perfecto/a”, anulando todo tipo de espontaneidad y de funcionamiento libre y creativo.
¿Cómo se sale de un trastorno obsesivo?
¿Qué tiene que hacer? Mejor dicho ¿qué debe hacer el terapeuta? ¿Enseñarle a parar el pensamiento? No me parece lo más efectivo. A través de mi experiencia en el tratamiento de trastornos obsesivos, algunos graves, el proceso pasa por la apertura de esos componentes lógicos, introduciendo una alta dosis de libertad, y, por supuesto, la capacidad de conectar con el “eros”, es decir de desarrollar una relación erótica con el mundo (por favor, no confundir con “sexualidad”).
Esto último significa “abrir la mente”, entender que la vida no son solo obligaciones y comportamiento “recto” sino un flujo de emociones, sensaciones e ideas que a uno le permiten están en relación abierta con la realidad, y no sumido y torturado por los propios pensamientos.
Por tanto, liberar la angustia es necesario para liberar la obsesión, y para liberar la primera se hace imprescindible conectar con la vida de una manera plena, y para ello es imprescindible amplificar, abrir puertas, en el software.
Damián Ruiz.
Psicólogo (Col.7884)
Analista junguiano (IAAP)
Barcelona.